La condena ha sido unánime en Bucalemu. Y es que en los sectores rurales de nuestro Valle de Aconcagua, la religiosidad se vive intensamente. Todo gira en torno a iglesias y capillas.
Por eso les duele tanto la profanación de la capilla, ubicada frente a la Escuela del sector. El cirio encendido alertó de algo anormal, como lo comentó la encargada del lugar, Malena Palacios.
Los delincuentes sustrajeron, además, distintas figuras religiosas.
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