La violencia está presente en todos los niveles. Se ha perdido el respeto hacia instituciones relevantes de nuestra sociedad, como son las profesoras y profesores.
La Escuela José de San Martín, la tradicional Escuela 62 de San Felipe, no escapa a esta nueva realidad.
Este jueves, un alumno de octavo básico, a quien se le llamó la atención, reaccionó de la peor forma. Insultó y humilló a una educadora, a una persona que estudió para enseñar, para acoger y guiar, y que no merece ser tratada así. Quedó destruida. Nunca esperó algo así. Violencia sicológica de un menor de edad. Pero los hijos son el fiel reflejo de sus padres. Y los tiempos, en estas cosas, han cambiado para mal.
La Directora del DAEM de San Felipe, Natalia Leiva, lamentó que estas conductas violentas se normalicen. Lo calificó como un problema social y sistémico.
“La bendición” fue suspendida y es altamente probable que el miércoles o, a más tardar el jueves, esté de vuelta en su sala. Porque ahora hay que tratar con guante de seda a estas “semillas de maldad”.
Y harán sentir que son ganadores y que, lamentablemente, pueden hacer lo que quieran. Y que no les va a pasar nada. Nada de nada.
