Miércoles 7 de julio de 2021. Un día que Jacqueline no podrá olvidar. Un día donde la invadió el dolor. Un día donde le cambió la vida. Ese día en la mañana, su hija Francisca, la Pachy, sufrió un accidente que a los pocos días, le costó la vida
Desesperada, decepcionada, triste, dolida… Faltan adjetivos para definir la vida actual de Jacqueline López Carvallo. De ser una mujer alegre, y que disfrutaba plenamente la vida, ese miércoles pasó a convivir con la angustia, con la desesperanza. Con ese sentimiento con el que transita mucha gente en Chile: que la justicia no es justa.
Y la vida se le transformó en un calvario. Siente que la muerte de su hija Francisca sólo le importa a ella. Y a la gente que la recuerda con cariño. En medio de un océano de dudas, Jacqueline sólo piensa en buscar la verdad.
Esta angustiada madre recuerda cada detalle. No va a estar tranquila hasta sentir que la verdad sale a flote. El dolor inunda su vida. Pero su dolor genera empatía a quienes deben administrar justicia?
Definitivamente, no.
