Lo de Benjamín es de esas historias increíbles. Un sueño hecho realidad. Este miércoles se transformó es el único chileno que entró a una cancha del Mundial de Qatar, algo que no lograron Vidal, Medel, Alexis, ni Bravo.
Benjamín Barrera León cursa cuarto básico en el Colegio Marista de Los Andes y tiene 10 años.
Es futbolero. Le gusta la Católica. Se sabe nombres, equipos, campeones y un largo etcétera.
Y participó en un concurso de Kía, la empresa coreana fabricante de vehículos, que auspicia el torneo. Tenía que grabar un video en inglés. Lo hizo junto a Graciela, su madre.
Y ganó. Tras cumplir 10 años, se contactaron con ella.
El Benja nunca había viajado fuera del país. Por lo tanto, no tenía pasaporte. Y, al ser menor de edad, no podía viajar solo, por lo que fue a tierras mundialeras con su padre, Walter.
Este miércoles, entregó el balón en el partido Túnez-Francia, donde estuvo al lado de grandes figuras que sólo había visto por la tele: Mbappé, Griezmann, Dembelé, Giroud, Varane, Camavinga y Tchouameni.
Su hermano mayor, el emocionado José Luis, nos contó más detalles.
Ahora, el Benja y su padre conocerán Qatar. Museos, desierto y lugares de interés. El sábado emprenderán el regreso a Chile, tras vivir lo que, definitivamente, es una experiencia inolvidable.
