Ya nada sorprende en el alicaído San Felipe. Pasarán Alcaldes y Alcaldesas, y la sensación de estancamiento, de abandono y de poca preocupación, muy difícilmente disminuirá, a menos que ocurra un milagro.
Las autoridades han sido superadas en tantas temáticas: La Toma, los lavadores de autos, los perros callejeros, consumo de drogas en la Plaza Cívica, el comercio ambulante, las cocinerías de Diego de Almagro. Todos estos problemas ya están instalados en el día a día de quienes viven en San Felipe.
Y en las últimas semanas se ha agregado el comercio sexual.
Mujeres y hombres que se dedican al más antiguo de los oficios, han ampliado sus espacios. Ya no están sólo durante las noches en Avenida Chacabuco. Hoy se les ve ofreciendo sus servicios a toda hora, en el centro, en la Plaza, en la parte baja de la Municipalidad.
La Delegada Provincial Maricel Martínez Vicencio, anunció la implementación de medidas para enfrentar el aumento del comercio sexual. Puso énfasis en la prostitución infantil.
Desde Carabineros se dijo que, aunque lo señalado no es ilegal, están enfocados en aumentar las fiscalizaciones para regular el comercio sexual y de esa forma, brindar mayor seguridad.
