No menos de 4 robos han afectado a joyerías de calle Prat, en San Felipe.
Noche de domingo para lunes, un solitario delincuente, aunque para Carabineros eran más, ingresó a la Joyería Arezzo por el techo, mismo lugar por el que huyó.
Cargó dos mochilas, una de las cuales dejó abandonada con una buena cantidad de alhajas avaluadas en 10 millones de pesos. Logró sortear una verdadera operación candado de Carabineros en Prat con Maipú. Con agilidad, huyó.
La mochila, que el “malviviente” cuidó como “hueso santo”, iba llena de pulseras, anillos, collares, aros, de variados materiales y calidades. La propietaria avaluó el monto de lo sustraído en 20 millones de pesos.
El Comisario Cristián Ramírez lamentó no haber podido detenerlo. Estuvieron muy cerca.
El oficial señaló que también fue detenido un sospechoso, quien tenía un amplio prontuario, y que a esa hora merodeaba por el lugar. Lo llevaron al cuartel, pero por decisión del Ministerio Público -dijo- fue dejado en libertad.