Se llevaron equipos caros, computadores, termómetros digitales, discos externos de gran capacidad. No forzaron la chapa de la puerta que da a la calle. Dato no menor.
La mañana de los lunes, habitualmente, quedan al descubierto hechos delictivos ocurridos durante el fin de semana en San Felipe. Y este lunes no fue la excepción.
Calle Navarro, entre Prat y Santo Domingo. Construcción nueva de dos pisos. En la planta baja, una tienda vende computadores e insumos. Los delincuentes pasaron por el lado. Sin forzarla, abrieron la puerta que da a la calle, la que permite acceder a las dependencias del segundo piso.
Tras subir la escalera, entraron a dos oficinas, como unos verdaderos caballeros. Abrieron la puerta como corresponde, usando la llave.
Los afectados son dos jóvenes: el empresario agrícola Mauricio Salvo y el arquitecto Felipe Godoy. Este último cuenta lo que vivió en las últimas horas.
Todos los equipos sustraídos tienen dispositivos de rastreo, los que se activan al ser encendidos.
Los afectados valorizaron lo sustraído en 6 millones de pesos. Esta noche, para estar tranquilos, prefirieron llevar todo para sus casas.
Es la tragedia de ser comerciante en San Felipe.
