Tazones, espejos, vasos y muchos otros objetos, son grabados por privados de libertad del Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de San Felipe. Gracias a estos trabajos, los internos pueden entregar un aporte económico a sus familias.
Son cinco los reclusos que se desempeñan en el Taller de Sublimación y Grabado. De lunes a viernes, atienden los requerimientos de quienes llegan hasta la unidad penal para solicitar algún trabajo en especial. Así lo comenta Jorge Cepeda.
En este taller se efectúa el trabajo de sublimación, por medio del cual una imagen puede ser estampada en diversos objetos, y el de grabado laser de maderas o cueros. El encargado de esta última labor es Fabián Cuevas (foto), quien explicó la tarea que lleva adelante.
El Jefe del CCP de San Felipe, Mayor Carlos Ortiz Sánchez, destacó la importancia que este tipo de iniciativas tiene para la población penal.
Con la finalidad de potenciar las ventas del taller, se instaló una vitrina en el ingreso a la unidad de Molina 10. De esta forma, quienes ingresan, pueden observar las creaciones de los internos y solicitar algún trabajo en particular, o bien adquirir los objetos que se exponen.
