Fue a fines de agosto. El Peugeot 2008 de la enfermera Bianca García Vega, fue incendiado mientras ella estaba de turno en el Hospital San Camilo. El autor material fue un hombre en situación de calle, quien llegó con un bidón y un encendedor para cumplir con el “encargo”.
En la misma formalización del 31 de agosto, la profesional de la salud aseguró que detrás de esa acción estaba su expareja.
Lo denunciado por García Vega cobró tal verosimilitud que, finalmente, tras dos meses de ocurrido el hecho, el sujeto fue formalizado.
El Fiscal Andrés Gallardo Cerda, eso sí, llevó su relato al 6 de agosto, cuando este tipo la amenazó de muerte. Su narración está llena de llamativos detalles.
Días después de la amenaza, el vehículo de Bianca García Vega era envuelto en llamas en el estacionamiento de su lugar de trabajo.
Simple coincidencia? O el ex contrató un sicario para quemar el auto?
La justicia tiene 2 meses, 60 días, para investigar un caso donde los celos y el ego dañado son protagonistas.
La Magistrada Carla Rigotti Alcayaga, en uso de sus atribuciones, prohibió dar el nombre del imputado. Sólo se pueden dar sus iniciales E.E.H.M.
Y, lamentablemente, tenemos que cumplirlo. Aunque no nos guste, y ustedes sientan que protegemos a quien no debemos y no queremos proteger.