La mayor afectación que provocó el sistema frontal en el Valle de Aconcagua fue en la Ruta Internacional.
Rodados, aludes, socavones, dejaron en esmirriada condición al principal paso fronterizo entre Chile y Argentina.
Los daños son estructurales y, hasta el momento, difíciles de cuantificar. Para dejar la importante vía en las mismas condiciones en que estaba, se requerirán estudios, recursos y tiempo, mucho tiempo.
Se pretende, si lo permiten las medidas de seguridad que el camino vuelva a operar, en forma parcial y con segregaciones en un plazo máximo de una semana, como lo señaló la Delegada Regional, Sofía González Cortés.
Este miércoles, se espera en Los Andes al Ministro de Transportes, el carismático Juan Carlos Muñoz Abogabir quien recorrerá, junto a autoridades regionales y locales, el camino internacional.
El panorama es desolador. Pero hay que buscar una solución, aunque no sea la óptima. Y es que, por el Paso Los Libertadores, se desarrolla una importante actividad económica, quizás la más importante del cono sur.