Por Eugenio Cornejo Correa.
Aconcagua optó por la continuidad. En 9 de sus 10 comunas, los vecinos le renovaron la confianza a sus alcaldes y alcaldesas, con un considerable aumento de votos.
Y en esa dinámica, el gran ganador de la jornada electoral fue Christian Ortega. 8 de cada 10 vecinos de San Esteban votó por él.
En Llay Llay, Edgardo González llegó a su último período con el 70 por ciento. Mientras que Claudio Zurita, candidato único en Santa María, si se le descuentan nulos y blancos, recibió el respaldo de un 84 por ciento de sus vecinos.
Crecieron en su apoyo Rodrigo Díaz, Gonzalo Vergara y Dina González en Catemu, Panquehue y Calle Larga, respectivamente. Los tres superaron el 60 por ciento de apoyo.
Y aunque Manuel Rivera no alcanzó los 45 puntos que se impuso como meta en Los Andes; tuvo un triunfo consistente, lo que le permite al edil UDI enfrentar su último período con aplomo.
Antes de iniciarse el proceso electoral, se anticipaba que las luchas más reñidas iban a tener como escenario tres comunas: Putaendo, Rinconada y San Felipe. Definitivamente, eso no fue así. Una cosa son las redes sociales; para cierto grupo de “eruditos”, un verdadero mantra. También se instala el “miente miente, que algo queda”. Pero la verdad está en la calle.
En Putaendo, Mauricio Quiroz logró un sólido 42 por ciento. Pero, a sus espaldas, la correlación de fuerzas registró un cambio brutal. El Concejal Miguel Ortíz superó los 4 mil votos. El veterinario se transformó en un candidato competitivo y, de paso, jubiló de forma categórica cualquier opción alcaldicia de Patricio Ernesto González Núñez y del temible séquito que lo acompaña, quienes deberán buscar una opción laboral distinta a la que soñaban frente a la Plaza de Armas. Nada es gratis en la vida. Todo es por algo.
En Rinconada, Juan Galdames Carmona llegó a la meta con el 35% de los votos. Solo contra otros ocho aspirantes al cargo; con campañas de desprestigio que llegaron hasta a la televisión, acusaciones que la justicia aún no investiga ni formaliza, candidatos que repartieron dinero en campaña.
El resultado de la primera mesa, ampliamente favorable a Galdames, y la reforzada presencia militar y policial, desactivaron cualquier intento de asonada del inefable Montenegro. Por esta razón, la barricada que apareció en Auco al caer la noche, sólo pareció una legítima opción de “patear la perra”.
Y en San Felipe, el triunfo de la Dra. Carmen Castillo comenzó a percibirse en las horas previas a la elección. Por una parte, la campaña de la Concejala Patricia Boffa, mientras más visible y sonora se hacía, más se debilitaba. Lo mismo ocurría con el Dr. Christian Beals. El famoso dicho “dime con quien andas y te diré quien eres”, empezó a definir la elección. El voto comenzó a endurecerse, y sin hacer una gran campaña, y con una gestión con más sombras que luces, la exministra de salud de Bachelet recibió un cheque en blanco de la comunidad.
En cada uno de los concejos municipales hubo cambios. Salieron algunos emblemáticos e ingresaron nuevos nombres. Noticia saludable, por lo demás.
A nivel de Consejeros Regionales, Edith Quiroz y María Victoria Rodríguez continuarán representando, por un nuevo período, a la Provincia de Los Andes.
Mientras que en San Felipe, hubo renovación total. Rodolfo Silva, Fernando Astorga y Maricel Martínez serán los nuevos CORE.
Con la votación más baja, la exdelegada provincial de San Felipe llegó al cargo que pretendía, tras realizar una gran campaña. Demostró que es una muy buena candidata. Cercana, convincente, simpática. Sus potencialidades fueron más potentes que sus lados oscuros: la deuda por pensión alimenticia y la relación con el Comité LGTB. Sin esos puntos en contra, pudo lograr la primera mayoría y generar un beneficio aún más grande a la futura candidatura a Diputado de Marco Antonio Núñez.
Los votos de Aconcagua sólo los entiende la propia Aconcagua